jueves, 30 de noviembre de 2017

Entrevistando a la Resistencia: p.nitas*, artista feminista

En la décima entrega de la sección Entrevistando a la Resistencia, en que entrevisto a activistas, artistas y, en la mayoría de los casos, ambas; os traigo una entrevista con p.nitas*. Ella es Inma, ilustradora, "artivista" y ciberactivista feminista extremeña; se licenció en Bellas Artes en la Universidad de Barcelona y desde hace más de 12 años se dedica a dibujar su propio universo utilizando gritos y cuerpos de mujeres como medio de expresión, desde una sensibilidad radicalmente feminista (Web: p.nitas* / Twitter: @p.nitas* / Facebook: p.nitas*).


___________________________________



1. ¿Cómo nace el proyecto p.nitas*? ¿A qué se debe el nombre y qué es lo que te impulsa a seguir dándole vida a esta regeneración artística y feminista?

El proyecto p.nitas* nace durante mis estudios de Bellas Artes en la Universidad de Barcelona. Fruto de un proceso de búsqueda y casi por accidente me encontré con ellas, pues surgieron desde los garabatos que hacía en los márgenes de los cuadernos en las clases teóricas.

El nombre viene de la profunda tristeza que sentía en aquella etapa de mi vida y de la sensación que tuve cuando empecé a dibujarlas, como si estuviera sacando mis penitas hacia fuera a través de los dibujos de cuerpos de mujeres desnudos y gritando.

Mis ilustraciones a veces resultan agresivas a quien las mira, en ocasiones algunas personas me han contado que han necesitado tiempo para entenderlas y verlas desde la distancia para poco a poco acercarse a ellas. Lo que he sentido durante los más de 10 años que llevo dibujando pnitas, es que no dejan indiferente, tanto si te gustan como si no y que han sido la primera puerta para muchas personas por la que acercarse y enrar en el feminismo. Al conocer mi trabajo se ha abierto una puerta que lleva a otra puerta que se abre y a través de cada una de ellas, muchas compañeras y amigas han tomado conciencia de lo que significa el feminismo y del papel que tenemos para juntas acabar con la opresión que el sistema capitalista, racista heterocispatriarcal ejerce sobre nosotras.



Lo que me impulsa a seguir es la necesidad de expresarme y que solo sé hacerlo a través de los dibujos. Es mi terapia y a la vez mi modo de vida, así que no hay un solo día en el que pueda estar sin dibujar. Incluso cuando no estoy dibujando estoy pensando en dibujar.


2. Dibujas muchos cuerpos. Y muchas vulvas. Yo ahí me pregunto: ¿cómo desestigmatizar, destabuizar toda la genitalidad asociada a la mujer (y por ende censurada e incluso violentada mediante mutilaciones) como puede ser creando y hablando sobre coños, reglas, pezones...; sin caer en la perpetuación del sistema binarista que asocia unos genitales a un género e invisibiliza y violenta a su vez a nuestras compañeras trans, pues también hay mujeres que tienen pene, que no tienen tetas, que no tienen la regla? ¿Has realizado alguna ilustración o ilustraciones con la intención de visibilizar y reivindicar también las cuerpas trans?

Mi trabajo trata de resignificar el significado otorgado al cuerpo de la mujer desde la antropología del sistema heterocispatriarcal, romper con el sistema binario de sexo/género y subvertir el orden de nuestra sociedad.

Mayoritariamente dibujo sobre lo que soy y sobre mí misma, pero también en ocasiones he ilustrado cuerpas trans. Por ejemplo el dibujo más reciente que he realizado sobre los disturbios de Stonewall es un ejemplo de ello.


3. También dibujas a muchas mujeres que gritan. ¿Qué significa, para ti, gritar en un patriarcado más allá de alzar la voz en una manifestación? Teniendo en cuenta que no todas podemos gritar, ya sea en su sentido más físico por algo tan evidente pero a la vez tan invisible como las diferentes capacidades físicas de cada mujer, como en su sentido más metafórico por diferentes situaciones de mujeres que todavía no se atreven a ser una parte activa de la lucha por nuestra liberación. Hay algo desgarrador, también, en tus ilustraciones de mujeres gritando. ¿Qué conciencias crees que remueves al representar ese desgañitarse, ese dejarse la piel por una causa tan crucial?

Para mí dibujar mujeres gritando habla de que lejos del silencio que el patriarcado un día otorgó como uno de los valores más importantes de la mujer, mis ilustraciones no se callan, no tienen los labios cerrados, ni la boca ni los labios vulvares.

Esas dificultades para decir lo que pienso también las he tenido y las tengo, aunque estoy aprendiendo a superarlas. He sentido impotencia por querer hablar en público y no ser capaz de hacerlo, durante casi toda mi vida, por sentir que lo que pensaba no tenía sentido, ni merecía ser escuchado. A través de mis dibujos, hablo también de esto y de la necesidad de cambiar el orden establecido participando en todas las esferas públicas y sociales, escuchándonos, reconociéndonos y haciendonos escuchar.


4. Como conocida ilustradora, artista feminista, tu obra se ha vuelto viral; y habrás recibido muchas buenas palabras, muy sentidas. ¿Puedes hablarnos de alguna de esas anécdotas que a una se le quedan grabadas, frases de agradecimiento y reconocimiento, gestos de compañerismo y sororidad que no se olvidan?

Tampoco soy tan conocida, esa es la verdad. Pero si que he tenido muchas experiencias muy positivas relacionadas con mi trabajo. Lo que más me conmueve, después de todos estos años es una sensación que me acompaña siempre y que se hace intensa en los momentos más difíciles. La sensación de que no estoy sola, de que nunca voy a estarlo, pues me siento parte de una red muy grande que se extiende a nivel global y que está formada por personas de todas las edades, partes del mundo incluso por quienes ya no están, pero que han dejado con nosotras un legado que sigue vivo.


5. Ahora mismo, estás en medio de tu campaña de recaudación para poder hacer realidad el Calendario y Agenda Feminista de 2018 bajo el lema "Viva la Victoria": Grandes Logros Feministas y Comunitarios. Nos cuentas: "en estos tiempos convulsos e individualistas que vivimos, recuperar estas hazañas, traerlas a nuestra vida diaria y darles fuerza e importancia es un ejercicio de memoria colectiva y de genealogía feminista, y que nos ayuda a recordar que la unión es la manera de derrocar al sistema capitalista racista y hetero-cis-patriarcal". ¿Qué estás aprendiendo durante este proceso que tanta esperanza debe desprender al volvernos conscientes de la fuerza de nuestra lucha, de la fuerza de nuestra unión? Y ¿cómo crees que puedes aportar tu granito de arena a la lucha por la liberación de las cuerpas racializadas y migrantes, de las cuerpas disidentes sexuales o LGTBI, por medio de la ilustración (teniendo en cuenta que muchas veces el arte feminista se limita a la reivindicación de la lucha y las imágenes de mujeres blancas, occidentales, cisgénero y heterosexuales)?

Estoy aprendiendo a gestionar una de las partes que más me cuesta de mi trabajo y es la de monetizar mi tiempo y mi creatividad. Tengo que reconocer que detesto necesitar dinero o vender mi trabajo, pero a la vez me hace muchísima falta como a todo el mundo, pues tengo personas a mi cargo y estoy aprendiendo con la financiación colectiva a sentirme menos incómoda con esta parte del trabajo.

Mi granito de arena está intentando ser interseccional y representar la liberación de las cuerpas racializadas y migrantes, de las cuerpas disidentes sexuales o LGTBI, a nivel global y no sólo desde la perspectiva euro blanca. En primer lugar me he propuesto dibujar sobre comunidades de todas partes del mundo y sobre logros que no fueran especialmente conocidos aunque sí significativos por lo que han supuesto en sus comunidades y el efecto mariposa que han tenido y siguen teniendo.


Mi ilustración del mes de Mayo sobre los disturbios de StoneWall, con motivo del día contra la homofobia y la transfobia habla de de las cuerpas disidentes sexuales o LGTB. Como sabemos fueron liderados por mujeres negras trans. Subrayar y visibilizar lo significativo de las luchas colectivas y el legado que acontecimientos a lo largo del planeta y de la historia han dejado y lo que ha supuesto para cuestionar el orden establecido. Son ejemplos de múltiples feminismos derrocando los múltiples patriarcados.


6. Por último ¡estoy segura de que a todas nos encantaría que nos hablaras un poco más de ti! Háblanos de aquellas aficiones, gestos, vínculos que prenden la mecha de la esperanza en medio de la penumbra de este mundo tan cruel; del deporte, la espiritualidad, los lazos con otras personas (y sobre todo, con otras mujeres)... del arte en todas sus formas, tanto en calidad de creadora como de público y consumidora... del activismo, también

Pues hace dos años que he sido mamá, mi vida gira en torno al artivismo feminista mientras cuido de mi hija. Resulta que nunca me había imaginado lo que significaba realmente. Sigo abrumada de lo que supone tener una personita creciendo a tu lado, del abanico de sentimientos que ni me había imaginado existían.  También durante esta etapa mi faceta artivista se ha hecho más intensa y los lazos con otras personas y sobre todo, con otras mujeres me han resultado el sostén, la fuerza con la que conseguir superar la adversidad aprendiendo y creciendo tanto en el plano personal como profesional, tanto en el plano físico como en el virtual.

viernes, 24 de noviembre de 2017

Entrevistando a la Resistencia: Sara, lectora y feminista acérrima

En la novena entrega de la sección Entrevistando a la Resistencia, en que entrevisto a activistas, artistas y, en la mayoría de los casos, ambas; os traigo una entrevista con Sara. Ella tiene 21 años y estudia Filología Hispánica y se pasa el día leyendo; intenta aprender cada día más sobre todos los feminismos (Twitter: @nnoviembre / Instagram: @nnoviembre).


_______________________________________________________________



1. ¿Qué significa el feminismo, qué significan los feminismos, para ti; en tus propias palabras? ¿Qué ha supuesto el feminismo, qué han supuesto los feminismos, en tu vida; han cambiado algo, han supuesto algún giro de tuercas, te han abierto los ojos a alguna realidad antes desconocida...?


Ha cambiado muchísimo mi vida, demasiado. En un principio a nivel personal: me hizo ver conductas que no eran sanas y también me ayudó a ser consciente del machismo que tenía en mi cabeza. Ayudó sobre todo en mi relación con los hombres (tenía metido en la cabeza que siempre iba a ser inferior a la persona con la que estuviera) y es algo por lo que nunca voy a poder dejar de dar las gracias. Después vino lo mejor: descubrir las voces de las demás, sentir que hay una comunidad de mujeres increíbles, entender la doble marginación de las mujeres negras, asiáticas, latinas... Entender que el feminismo iba de la mano de la lucha contra el racismo, contra el capitalismo, contra la pobreza... ser consciente de que estamos luchando por algo inmenso. También me ha ayudado a darme cuenta de mis privilegios respecto a otras compañeras y lo importante que es aprender de ellas y sus discursos. Feminismo, para mí, es estar en continuo aprendizaje, es vivir con mil contradicciones, es darte cuenta de que has dicho barbaridades muchísimas veces (y quizás alguna se te escape), pero sobre todo es intentar cambiar las cosas cada día, es estar agradecida por lo que te enseñen tus compañeras.
Libros favoritos... el que más me ha marcado sin duda es «Tokio Blues»; Murakami llegó en el peor momento de mi vida y marcó un antes y un después en mi relación con los libros. También diría que los Diarios de Alejandra Pizarnik siempre van conmigo, tengo que estar abriéndolos continuamente por la página que sea para releerla.
Y, sin duda, «Los estómagos» de Luna Miguel. Ese libro lo significa todo.
3. ¿Cuál es, en tu opinión, la situación actual de las escritoras mujeres? ¿A qué obstáculos se enfrentan que sus colegas hombres no han de confrontar? ¿Cómo crees que la literatura, la escritura, pueden volverse armas empoderantes en manos de las mujeres; para su propio conocimiento, y posterior liberación?


Ahora mismo el feminismo para mí es una forma de vivir: es una lucha constante para cambiar el mundo, por liberarnos de este sistema patriarcal.




2. ¿Siempre has sido una lectora acérrima? ¿Qué implica para ti la lectura, qué ha supuesto en tu vida? ¿Tienes uno, o varios, libros favoritos o que te hayan marcado de forma que no crees que nunca vayas a olvidar lo que han supuesto para ti?


La verdad es que odiaba leer de pequeña, muchísimo. Un día leí «Mujercitas» y me encantó así que mis padres intentaron que siguiera leyendo y me regalaron «Crepúsculo» (ellos no sabían ni de qué trataba pero viendo el éxito, probaron). Ahí me enganché a la literatura juvenil, la devoré y decidí salir un poco de esa temática. A partir de ahí ya no he parado de leer.

Ahora mismo la lectura lo es todo para mí: es una fuente de placer, me ayuda a desconectar y distraerme, pero sobre todo es una fuente de aprendizaje. Es increíble todo lo que puedes aprender en unas cuantas páginas. Conforme leo el ansia de leer más y aprender más aumenta, me hace sentir más llena aunque también es un quebradero de cabeza porque me hace ser consciente de lo limitada que es nuestra vida, de las injusticias, de que hay cosas que nunca voy a poder cambiar.






3. ¿Cuál es, en tu opinión, la situación actual de las escritoras mujeres? ¿A qué obstáculos se enfrentan que sus colegas hombres no han de confrontar? ¿Cómo crees que la literatura, la escritura, pueden volverse armas empoderantes en manos de las mujeres; para su propio conocimiento, y posterior liberación?



En el ámbito educativo las escritoras siguen invisibilizadas y esto es preocupante, estamos hablando de que la educación que reciben los niños está llena de ejemplos masculinos y algunos pocos femeninos (todos hemos estudiado a Emilia Pardo Bazán y a Rosalía de Castro). Por eso me parece tan importante iniciativas como #LeoAutorasOct o el activismo que hay en las redes para recuperar esas voces femeninas; gracias a ellas mi estantería ha pasado de estar poblada por escritores a ser las mujeres la mayoría.

Por otra parte para que se las tome en cuenta parece que las mujeres tienen que estar continuamente demostrando lo buenas escritoras que son. El machismo está en todas partes y la literatura no iba a ser menos, que además siempre se ha considerado un oficio de hombres (no hay más que ver los halagos que recibían antes: “escribe con un hombre”, etc.). Una cosa que me molesta muchísimo en este tema es que cuando se habla de escritoras siempre tocan temas como si son lo suficientemente guapas o si son jóvenes o cualquier tontería que se les ocurra; sin embargo, no he visto que esas preguntas sean comunes en entrevistas a escritores.

La literatura es un arma en sí misma y en estos últimos años me he dado cuenta del poder que tiene: he encontrado un lugar en el que aprender, en el que verme a mí misma. He buscado la historia de mujeres a las que admiro, me he empapado de ellas y ahora forman parte de mí. Escritoras como Gloria Steinem, Eve Ensler, bell hooks,… a través de sus escritos somos capaces de ver una realidad nueva, de aprender y aplicarlo a nuestra vida, a nuestra lucha. Ya no soy capaz de encontrarme en las novelas de los escritores, no siento esa conexión que encuentro en ellas porque poco a poco vamos tejiendo una comunidad en la que crecer y apoyarnos.

viernes, 17 de noviembre de 2017

Entrevistando a la Resistencia: Icíar Andreu

En la octava entrega de la sección Entrevistando a la Resistencia, en que entrevisto a activistas, artistas y, en la mayoría de los casos, ambas; os traigo una entrevista con Icíar Andreu. Ella tiene 21 años y estudia música y en sus ratos libres intenta hacerla y disfrutarla; es activista feminista, LGTBI (es una mujer bi) y anti-gordofobia (Twitter: @BlackRose_Iciar / Instagram: @iciar_rosanegra).

____________________________________________


1. ¿Cuáles son tus exigencias para los feminismos hegemónicos como mujer que muchas veces se sale del "modelo de mujer" establecido muchas veces por estos?

Me gustaría que no se dejasen en el camino temas también importantes dentro del feminismo, y por lo tanto a compañeras, a la hora de luchar. Para mí, el feminismo debe incluir a todas las mujeres. Todas. Y últimamente es algo que veo que parece olvidarse.


2. ¿Qué implica para ti la gordura, tanto en el terreno del activismo tanto cibernético como local, como en tu vida diaria, tus relaciones...?

Es un tema que lleva conmigo desde siempre. Hay personas que se pensarán que no es para tanto, por eso esta pregunta me parece muy interesante. Voy a ser muy breve pero quiero que se tenga muy en cuenta.

La gordura para mi implica tener que aguantar comentarios que no a todes nos hacen. Miradas de asco, superioridad por parte de muchas personas. No poder estar tranquila en mis redes sociales, sobre todo haciendo activismo bodypositive y hablando de gordofobia, recibiendo una cantidad de acoso impresionante. El mismo acoso que llevo recibiendo desde niña en el colegio, en el instituto, piscina/playa, en la calle. Haber estado aguantando a médiques gordofóbiques, haber puesto en peligro mi salud (física y mental). Haber llegado a pensar que jamás tendría a alguien que me quisiera, ni siquiera a mi misma. Todo eso es lo que significaba y todavía significa para mí tener un cuerpo gordo en una sociedad como en la que vivimos.


3. ¿Te gustaría contarnos algo sobre cómo te diste cuenta de que no eras heterosexual y, más concretamente, de que eras bi? Especialmente, que aconsejarías a otras jóvenes sáficas (no hterosexuales) y, más concretamente, bis que se sientan aisladas, solas, repudiadas?

Me ayudó mucho descubrir que amigas cercanas lo eran y ver como ellas "salían del armario". Ver que no pasaba nada y llegar al punto de pensar que si ellas habían podido lograr ser quienes realmente son, yo también podría. Eso me dio fuerzas para aceptar en mi que no sólo me gustan los chicos, que soy bisexual. Y me gustaría hacerles saber a otras chicas que puedan estar viviendo algo parecido, que no están solas. No estáis solas. No os forcéis, poco a poco os daréis cuenta de que hay más chicas como vosotras, incluso en vuestro entorno cercano, y si no las redes sociales os pueden ayudar. A mí me tenéis aquí para lo que necesitéis igual que a muchas otras compañeras.


4. ¿De qué formas encuentras tú el alivio tras un día más de ser una mujer gorda bi en un mundo cisheteropatriarcal y gordófobo? ¿Es a través del arte, la escritura, el deporte, la contracultura, los lazos con otras mujeres, como tú o diferentes...? ¿Qué puedes contarnos sobre ello?

Intento que el máximo de cosas posibles me ayuden para así poder tener varias vías de escape, ahora cuento el por qué. Mi principal vía de escape es y siempre lo ha sido la música. Es mi pasión y mi sueño desde pequeñita. Intento encontrar nuevos estilos, nuevos grupos y cantantes. Escuchar música reivindicativa que me motive a seguir luchando y música que sólo me haga desconectar, pero también para mí es un arma de doble filo, pues igual que me ayuda a sobrevivir también me puede traer otros sentimientos. Así que desde que me di cuenta intento tener otras vías para escapar de todo. Veo series y películas, uso mis redes sociales fuera del activismo e intento hablar y crear lazos con otras personas como yo, sobre todo mujeres. Esto último es maravilloso.

viernes, 3 de noviembre de 2017

Entrevistando a la Resistencia: Megane Mercury


En la séptima entrega de la sección Entrevistando a la Resistencia, en que entrevisto a activistas, artistas y, en la mayoría de los casos, ambas; os traigo una entrevista con Megane Mercury. Él es un artista multidisciplinar: periodista, fotógrafo, cinematógrafo y diseñador gráfico (además de cantante y modelo) que visibiliza la resistencia y la belleza negras (Twitter: Megane Mercury Heika / Instagram: Mercuria Mýstika).



_____________________________________________________



1. ¿Cuáles son tus exigencias a los movimientos políticos como hombre que a menudo se sale del "modelo de hombre" a menudo defendido por los movimientos políticos hegemónicos?

Mi principal exigencia es que el concepto de 'interseccionalidad' se entienda correctamente y se actúe en consecuencia a este. Podría decir que la mayoría de personas que conozco o que he visto que están involucradas tanto en movimientos LGBT como antirracistas no comprenden que ambas opresiones funcionan de manera diferente sobre personas como yo y por lo tanto esto nos da una visión totalmente distinta de cómo debería ser el activismo de estos movimientos políticos. Consecuentemente, otra exigencia sería dar facilidades para poder expresarnos y ser escuchados, ya no por obligación, sino porque en mi opinión, un movimiento político ha de tener en cuenta a todos los pertenecientes del colectivo por el que lucha y eso incluye a gente como yo.


2. ¿Qué implican para ti la racialización y, más concretamente, la negritud tanto en el activismo desde cibernético hasta local como en tu vida diaria y en tus relaciones con otras personas, también racializadas, o blancas?

Aunque yo no soy activista como tal diría que en este campo la racialización supone una sobreexposición de mi persona, pero no sólo eso. Digamos que llega cierto punto en el que te das cuenta de que tu racialización, en mi caso mi negritud, es un factor que determina y va a determinar el cómo de toda relación que yo establezca con cualquier persona; así como la percepción que se tiene de mí respecto a todo lo que yo haga o diga.



3. ¿Te gustaría contarnos algo sobre cómo te diste cuenta de que no eras heterosexual? ¿Especialmente, qué aconsejarías a un chico más joven que acaba de darse cuenta y se siente solo, aislado, repudiado...?

La verdad es que yo nunca me había planteado seriamente mi sexualidad hasta los 17-18 años aproximadamente (y tengo 21), era como si la heterosexualidad me viniera impuesta, pero sin el cómo. Considero que estoy le pasa a todo el mundo. Sin embargo, en mi caso he de decir que la figura del hombre negro, en este caso cis-género, por una serie de factores que ahora mismo no voy a mencionar porque se me alargaría demasiado la respuesta, se ha hiper-masculinizado lo que provoca que esa heterosexualidad impuesta por defecto tenga una influencia aún mayor.Por otro lado, mi consejo para un chico más joven que no es heterosexual y acaba de darse cuenta, es que una vez una vez que te has percatado de ello y te has aceptado, todo va a mejor. Es básicamente una cuestión de identidad y creo que en este aspecto la gran mayoría de personas no heterosexuales estarán de acuerdo conmigo. Sin embargo, sí que ha de tener cuidado, sobre todo al principio, de con quién comparte su orientación sexual abiertamente porque nunca sabes con quién te puedes encontrar. De hecho, diría que es algo que incluso las personas que no somos heterosexuales públicamente debemos tener en cuenta también.



4. ¿Qué le dirías a un chico negro más joven que vive rodeado de personas racistas y se enfrenta cada día a un mundo supremacista blanco? ¿Cómo intentarías transmitirle algo de esperanza, acompañamiento, apoyo y hasta ganas de luchar?

Bueno, considero que esta es una pregunta algo difícil de contestar dado que en mi opinión no hay una única respuesta o siquiera una respuesta válida. Cuando eres más joven (y ahora) normalmente sufres un problema de identidad, en el sentido de que piensas que eres igual y la sociedad te hace darte cuenta de que no es así y no entiendes muy bien por qué. Aunque la formación ayuda mucho, no supone una solución absoluta para este fenómeno; así que habría que analizar las distintas situaciones que se pueden dar en el contexto de un chico joven rodeado de personas racistas en su día a día, lo cual es una situación bastante habitual.Mis palabras de apoyo, o más bien de consejo, serían que esperara y a la vez buscara a gente como él. Inevitablemente gente como tú o parecida a ti se va a cruzar en tu vida, y hay que saber aprovechar esos momentos porque si tienes mala suerte no te cruzarás con muchas de esas personas a lo largo de tu existencia.



5. ¿De qué formas encuentras tú el alivio tras un día más en un mundo heteronormativo y supremacista blanco? ¿Es a través del arte, la escritura, el deporte, la lectura, la contracultura, los lazos con otras personas, como tú o no…? ¿Qué puedes contarnos sobre ello?

Bueno, en mi caso diría que, como se menciona en la pregunta, cosas como el arte (en mi caso la fotografía, por ahora) y el deporte (juego a balonmano desde pequeño, aunque lo he dejado hace poco) entre otras muchas cosas que hago forman un espacio de evasión, olvido y a la vez crecimiento de mi persona. Sin embargo, lo que sé que siempre va a funcionar es hablar con hermanas como Choco, Melisa o Winnie y reírnos un rato de la vida en general y de las cosas que nos pasan.



6. ¿Qué significa la fotografía para ti? ¿Cómo la relacionas con el activismo político y con la resistencia de unas existencias disidentes?

Si te soy sincero, la pregunta de "qué significa la fotografía para mí" está aún por resolver, supongo que esto es algo a lo que se enfrenta todo artista (suponiendo que pueda incluirme en ese término) o persona que tiene una pasión.Mi manera de relacionar la fotografía con el activismo político y la resistencia de existencias disidentes es simplemente mostrando la belleza de estas existencias, las cuales no se ven, no se quieren ver o no mostramos por miedo a esa sobreexposición de la que hablaba anteriormente. Por el momento no estoy trabajando en ningún proyecto en especial pero sí tengo unas cuantas cosas en mente que abarcarán varios temas y narrativas.

lunes, 30 de octubre de 2017

Interviewing Resistance: Queer Zines

Queer Zines is a blog about queer zines and books, plus other zines of interest, including calls for submissions, new zines, distros, zine fests and more.


______________________________________________




1. How did the idea of creating Queer Zines first cross your mind ? What is the ultimate purpose of editing political & artistic zines in general, & of Queer Zines in particular ?

I used to run a zine distro called The Alchemist's Closet, with a focus on queer, trans, feminist, punk and anarchist zines, for many years. It was a lot of fun working with different zine creators all over the world and maintaining relationships with them over the years.

When I became ill with CFS/ME (chronic fatigue syndrome/myalgic encephalomyelitis), I couldn't fulfill all the requirements of running a distro, like making copies and going to the post office throughout the week. I started Queer Zines so that I could keep promoting zines by queer artists and authors. I also promote other zines that I think queer people will like. 

A while back I also added a Facebook group, Queer Zines, at www.facebook.com/groups/queerzinesgroup/.

Queer Zines is a place to promote zines, learn about new zines, and find zines to submit to.



2. What are your demands for LGBTI mainstream, standard political activism as a radical rainbow folk in a liberal society ? What was your first approach to LGBTI political activism, both locally & online, like & how has the LGBTI movement changed your life (changes, new encounters & visions...) ?

I'm not sure if I live in a liberal society but hopefully it's trending toward a more liberalized view of social and romantic relationships. I believe in personal freedom, equality and peaceful relationships. At this point in human development, we actually have some good models for what those values look like in action. We know that people should have the freedom to make, maintain, or leave relationships. We know that people make better choices when they feel supported, safe, and like they have options in life. At the same time, as human beings, we consistently fail to supply these conditions to each other.

As queer people, we have been marginalized throughout much of history in many societies because we don't do what we're supposed to, and that makes people in power look bad. It threatens the different systems that are used to control people. People in general don't want to be controlled, so queer people have a lot in common with other people, including other marginalized people. Nobody wants to live their life under threat.

I would like to see mainstream LGBT+ activism engage in a substantial way with the issues of economic equality, poverty, citizenship and migration, racism and gender. We also have to connect to issues of healthcare access, trauma, and toxic masculinity. It isn't really the time for single-issue campaigns anymore.

My first exposure to LGBT+ activism was through the Human Rights Campaign and equal marriage rights. There were a lot of queer people who were just trying to survive, but marriage was being positioned as the answer to all of our problems. It isn't. A great deal of money was spent on equal marriage during a time when other LGBT+ resources almost disappeared. Now that equal marriage is finally the law, many of those resources are returning, and we can talk about these other issues more, like trans rights and safety and healthcare access.



3. How did you first realize you weren't straight and/or cisgender ? What would you tell a younger rainbow folk who realizes they aren't, surrounded by LGTBIphobic people in a cisheteropatriarchal world ? How would you try to give them hope, support, & even the will to fight this system ?


I was probably 14 or 15 when I realized I was queer. Probably the first thing that happened was that I realized I was attracted to a variety of gender expressions and genders,  but that I was particularly interested in androgyny and people who didn't express themselves in mainstream ways. As I went through adolescence I became more interested in gay and bisexual men and started to trend toward being interested almost exclusively in fantasizing about sex between men. 


As I was assigned female at birth, I didn't really have any way to process this. It was 2003, when things were very different, and I was not that aware of trans people existing. The only model I had was through books like Stone Butch Blues by Leslie Feinberg, which mostly described butch lesbian identity. However, I identified with it. I had a feminine romantic partner who identified as a boy, but who later found themselves as a woman. The way I felt about her was the same way Feinberg described feeling about femmes.

I was still very unsure that I could be trans and also gay, because I hadn't really heard of that. Late one night, listening to NPR on the radio in my car, I heard an interview with a gay trans man who said he wasn't able to find a romantic partner. I cried because I identified with him, so I felt like there was some kind of future for me, but also because I felt like I would have to give up love to have it. I think a lot of young trans people have felt this way.

I came out as gay and trans around age 16/17, and as nonbinary in my mid-twenties.
To young queer and trans people, I would say that it's really valuable to study your history and understand that people like you have always existed. It's important to study queer theory and feminism so that you can untangle yourself from your upbringing and the values that have been forced on you. If you don't confront these things they will eat at you from the inside.


Feed yourself with media that shows people like you, whether its mainstream media or online subcultures or zines. If you start feeling bad inside and invisible and alone, bring up some Youtube webseries or TV shows with queer characters.
Unfortunately, some people still hate and fear queer and trans people and you'll encounter them sometimes. You don't have to accept them or their views, and it's perfectly alright to cut them out of your life.


4. In your blog, virtual & local political activisms & movements intersect as you spread the word for local zine events & distros & for virtually-downloaded/bought zines at the same time. What've you learnt about both local & virtual political activisms & movements from running Queer Zines ? How do they complement each other ?

​I think local zine cultures are very important because they connect people to zines who might not otherwise know about them. The trouble with the internet is that it's very niche-oriented, so you have to know about things in order to find them. If someone doesn't know about zines, how will they find out about them?

Often, it's local zine cultures that connect new people to zines. I started out in Bangor, Maine with GG Irkalla (Up the Witchpunx/Radical Hope) printing paper zines and leaving them around town and selling them at punk shows. We didn't really ship out many zines or sell them online. A lot of people who found our zines were probably like, "What the fuck is this?" Sometimes I got hate mail (and I do mean actual mail) because of my zines.

Once I distributed zines in Burlington, VT and I got a letter that said, "We have enough of you faggots here already." I got letters that threatened to r*pe me or throw me off a bridge for being a feminist. Today, that kind of stuff happens online, but for most zinesters, their online zine scene is a very protected space. Homophobes don't usually go looking for zines to order from Etsy so they can write threatening emails about them. So in a way, that's good, and the internet has connected and protected zine culture so it can grow really exponentially again. Zines are huge these days!

On the other hand, it's maybe less organic and fewer people are being exposed to new ideas.



5. Zines are all about art, writing, & culture. But mostly, zines (at least the zines Queer Zines helps promote) are also about politizing art, writing, & culture. In a cisheteropatriarchal, capitalist society in which culture is monopolized by cisgender, straight upper class men, how do you think zines & their making & distribution & reading can provide women, poor folks & LGBTI folks with an opportunity to both spread their own words & art, to change what is produced and how it is produced & to support & consume a different kind of culture ?


Zines are really cool because they have a low barrier to entry. If you have access to a pen, paper and a copier, you can make a zine. If you have access to a computer and free word-processing software that can make a PDF, you can make a zine.

When something has a low barrier to entry, it will always open up the field to more diverse people and more marginalized people. We have a legacy media system in place where fewer and fewer companies own the publishing houses, newspapers, etc. The media elite are risk-averse, so anything that is too different is a risk. Diversity is not an asset in their world. They want to publish things that are a little bit different, but still marketable to the average person, with all of that person's biases and fears. If you want media that is really for marginalized people, you have to go to the margins.

I hesitate to agree that cis, straight, white men monopolize culture. I think they definitely have attempted to do so, but culture has always been produced by queers, people of color, and poor people. People in power seek out that culture and try to make money from it.



6. When talking about both oppression & political activism, disability, madness & neurodiversity are too often left out of the conversation even in leftist environments. However, your blog does help promote zines on these issues & the way they intersect with being LGBTI, & you are disabled yourself. Do you think zines are accessible enough already, for people who can be disabled in multiple ways ? How has disability, & its intersection with being LGBTI, shaped your life & your political activism ?

I think that people are becoming more aware about the need for accessibility. Zines are very small-scale productions and often the accessibility of a zine comes down to the choices and abilities of an individual person, the creator. So I don't want to criticize anyone for making zines that are not accessible, because we (zine creators) also deal with our own limitations.

One of the things that zine creators can do is to create both digital and print zines. Digital zines can contain text that can be read by a screen reader, which is a computer program that reads text from the screen. Image descriptions and clickable navigation are also good accessibility features for PDF and e-reader formats. Basically, the more formats and features you can offer, the better.

Zine creators can also make sure that their "call for submissions" contains complete image descriptions and transcriptions. That means, don't make your call for submissions just a picture of text on an image. If you want to use a picture of text, also provide a text transcription. This isn't just a disability issue, because those little images with text on top are really hard to read on small screens, like phones.

Cost is another accessibility issue. Keeping costs down, or offering sliding scale, is a great way to make sure more people can access the zine.

Being disabled has definitely changed my perspective on zines. I now see accessibility as more important. I've switched over to digital zines for the most part, through my project Cutlines Press (www.cutlinespress.com). As a chronically ill person, it's easier to create and distribute digital zines because it's less physically demanding. There is also often a lower start-up cost.

However, I believe there will always be a place for paper zines, as well. For some disabled people, paper zines are what is accessible. Variety is good.



7. Finally, let's talk a bit more about you. What are the details, the tools (spirituality, counterculture, art, reading, sport, writing, bonding with other folks, rainbow or not...) that help you stay alive & keep breathing, both trying to live a happier life & to at the same time fight the system, in such a cruel world that so often alienates us & keeps us from understanding our own needs & interests ?


I am queer and trans and disabled. All of these things are important. My queerness isn't just queerness, it's disabled queerness and trans queerness; so forth. As a result of living with multiple marginalized identities, I tend to take different things from different groups of people and communities; like, I may not feel entirely at home in a queer context when disability isn't mentioned, or visa versa. I get things that I need from various communities and people. I rely on friends and family who know all the different parts of me and have known me as a whole person.

I'm an abstract, mixed-media fine artist. I also love to write, and I've written some experimental and sci fi zines and short stories, like Handsome Boy Pilot and Future Benin. I love sci-fi as a genre because it's a great vector for exploring political, social and spiritual concepts all in one package. My project Cutlines Press (www.cutlinespress.com) is a place where my friends and I explore some of these ideas.

We have a really exciting digital zine coming out this September called Radical Hope, edited by GG Irkalla and Ezmyreldra Andrade.  It will explore antifascist witchcraft, gnostic anarchism, Queer survivalism, and radical economics. 

lunes, 16 de octubre de 2017

Entrevistando a la Resistencia: Javier Erro, autor de Saldremos de esta

En la sexta entrega de la sección Entrevistando a la Resistencia, en que entrevisto a activistas, artistas y, en la mayoría de los casos, ambas; os traigo una entrevista con Javier Erro, autor del libro Saldremos de esta: Guía de salud mental para el entorno de la persona en crisis (Facebook: Javier Erro).


1. ¿Qué te motivó a escribir el libro Saldremos de esta?

Lo que principalmente me motivó… o mejor, creo que es mejor explicar un poco el momento. Fue cuando empecé a trabajar como psicólogo, venía de los movimientos sociales, acostumbrado a aplicar una perspectiva crítica a todo lo que había a mi alrededor; al comenzar a trabajar como psicólogo, me planteo cómo aplicar esta perspectiva crítica a mi trabajo, que es donde pasaré mucho tiempo y donde podré plasmar una posible transformación social.
Me puse a buscar material pero, a pesar de encontrar análisis más o menos certeros, la mayoría se basaban en constructos teóricos, sesudos y con un lenguaje muy especializado para personas especializadas en lo revolucionario, o la revuelta. Lo que no habían eran propuestas prácticas y, además, se planteaba que después de la revolución social todos los sufrimientos psíquicos iban a desaparecer, que en mi opinión es una propuesta un tanto utópica.
Además personas cercanas empezaron a pedirme consejo y me puse a reflexionar como alguien que es parte del entorno de otras personas que han experimentado sufrimiento psíquico o como alguien que lo ha experimentado él mismo. Esto me sirvió para hacer un cúmulo, con mi saber (mi conocimiento profesional) y con las experiencias de otras personas que habían experimentado el sufrimiento psíquico.
¿Que por qué escribí esta guía? Porque, pese a formar parte de ciertos movimientos sociales que en principio intentan aplicar una perspectiva colectiva, me di cuenta de que había una ausencia de herramientas concretas, específicas, sin mucha teoría de por medio, desde una perspectiva colectiva para el sufrimiento psíquico.


2. En una sociedad en que los profesionales de la salud mental reproducen tan a menudo conductas dañinas para sus pacientes, llegando incluso a vulnerar sus derechos mediante prácticas como la medicación forzada o la contención mecánica ¿cuál crees que puede ser el papel de un psicólogo concienciado que intente cambiar algo aun trabajando dentro del sistema?

El sistema son muchas cosas al mismo tiempo. Aquí, en España, un sistema público y un sector más privado donde se pueden hacer otras cosas. También tenemos el sector de asociaciones, colectivos de activistas, Grupos de Apoyo Mutuo… en cada uno de estos territorios se pueden hacer diferentes cosas.
En el terreno público no tengo tanta información de primera mano, pero sí conozco casos de profesionales que intentan sumarse a campañas como la de “0 contenciones” y que se han visto presionados o ninguneados por jefes o compañeros. ¿Se puede hacer más dentro del sistema público? Ahí entramos en una polémica, preguntarnos si introducir por ejemplo un Grupo de Apoyo Mutuo dentro de las instituciones las mejora, o si anula esta propuesta al quitarle el elemento de alternativa.
En cuanto a las asociaciones, por ejemplo de familiares, muchas llevan a cabo un discurso biologicista tradicional y psiquiatrizado; además, a menudo reciben subvenciones por parte de farmacéuticas. Por otro lado tenemos colectivos más de base, como FlipasGAM en Madrid o GAMValencia aquí, que tratan de crear desde una perspectiva completamente horizontal alternativas a las instituciones. Para mí tienen una potencialidad que me parece impresionante, a muchos niveles, a nivel pragmático y a nivel de discurso, pues están aportando visiones nuevas que yo todavía no había visto.
Después quedaría el sector privado, donde yo me muevo ahora mismo, teniendo mi consulta. La verdad es que tienes un poquito más de libertad respecto al sistema público, institucional, pero estás limitado por factores como el económico; tienes que cobrar una cantidad de dinero que hace que no sea accesible para todo el mundo.
Así, en todos los sectores hay un montón de contradicciones. Pero ¿qué puede hacer un profesional en ese sentido? Creo que lo primero es repensar, replantearse en todos los sentidos. Replantearse el tema de los privilegios dentro de los tratamientos o las terapias, cómo los espacios sanitarios son lugares donde el profesional ejerce un poder, disfruta de una serie de privilegios lo quiera o no (que se traducen en una serie de opresiones para la persona con sufrimiento psíquico, todo micro, pero no por ser micro deja de ser importante).
Un ejemplo de un privilegio del psicólogo o psiquiatra es elegir qué lenguaje se va a utilizar, qué temas se van a hablar y qué temas no. El privilegio de poder ser crítico con su propio trabajo, cosa que la persona con sufrimiento psíquico no se suele poder permitir.
Yo creo que ese es el primer paso, y creo que dado el contexto actual en España de explosión de colectivos y activismos de salud mental, hay que esperar un poquito más antes de dar otro paso, ver qué sucede, reflexionando. Y dando paso al debate, que no se está dando ahora mismo dentro del contexto profesional.


3. En tu libro no se habla mayoritariamente de diagnósticos, sino de vivencias o dolencias. Para ti ¿cuál es la diferencia entre ambas etiquetas (pues ninguna deja de serlo)?

La primera diferencia es la de “quién nombra qué”. Los diagnósticos son nombres que hemos puesto, que ponemos los profesionales, a diferentes sufrimientos; y “sufrimientos” me parece un término más global, más válido incluso, que engloba algo que le puede pasar a muchas personas.
No es lo mismo decir que una persona está diagnosticada con un Trastorno de Ansiedad, o con Abuso de Sustancias, que decir que está experimentando un sufrimiento psíquico que le conlleva ansiedad, abuso de sustancias, o lo que sea. Si ya planteas que lo que la persona está pasando es por un sufrimiento psíquico, entonces la atención que le vas a dedicar va a ser completamente diferente; la forma en que vas a hablar con esa persona va a ser totalmente diferente.
Si una persona tiene un diagnóstico de depresión vas a ir directamente a tratar esos síntomas, mientras que si está experimentando un sufrimiento psíquico vas a tratar de hablar lo que le sucede, pues el sufrimiento debe ser compartido.
El diagnóstico ahora mismo es lo que es, pero tiene una historia detrás que marca lo que es; está atravesado por una historia, la historia de la psicopatología, una serie de discursos e ideologías más o menos conservadoras (generalmente bastante) que son las que han marcado que tengan que ser este tipo de clasificaciones tan cerradas y tan exclusivistas.
Una reflexión que no se hace sobre los diagnósticos y sobre, en general, la psicología y la psiquiatría, es una historia crítica (hay alguna excepción, como Rafael Huertas). Recoger esta historia crítica puede llevarnos a afilar mejor lo que tiene que ser o lo que tiene que dejar de ser este sistema de diagnóstico.
También me gustaría apuntar que no me gustaría ser yo quien plantee una alternativa sólida al sistema diagnóstico existente, porque entonces se podría convertir en otro nuevo sistema cerrado, con las mismas taras que lo que tenemos ahora mismo. Esta es una cuestión sobre la que yo creo que hay que reflexionar mucho, el tema de las escuelas terapéuticas, que muchas veces deciden o se auto-proclaman más liberadoras que lo que existe ahora mismo (proclamando que tienen una relación más horizontal con las personas o que promueven un cambio social). Yo no digo que esto no sea así, sino que pueden convertirse en la nueva hegemonía dentro de la salud mental, que hay que centrarse en reflexiones mucho más globales, como por ejemplo el término sufrimiento psíquico, el término horizontalidad, el término colectivo, el término social… también el feminismo, también el racismo, toda una serie de opresiones que se entrecruzan. En vez de hablar de psicoanálisis, Gestalt, psiquiatría comunitaria, psicología social, terapia narrativa o un montón de ejemplos.


4. Si acudiera a ti una persona “loca”, “enferma mental” o cómo queramos o quiera llamarse desesperada por encontrar comprensión y apoyo en un mundo que no promueve la auto-comprensión y los cuidados sino el seguir a ciegas las pautas dictadas por psiquiatras que demasiado a menudo nos tratan de forma impersonal ¿qué le dirías? ¿Cuál o cuáles serían tus consejos?

Ojalá lo supiera. A mí sí que me gusta el término “empoderamiento”. Suele haber una crítica, la gente suele decir “no me gusta el término pero lo voy a utilizar”, pero a mí me gusta: el poder existe, va a seguir existiendo, y es mejor tenerlo nosotros que no tenerlo.
Empoderarse puede ser encontrar la capacidad de criticar al profesional que te está tratando, sea psiquiatra, sea psicólogo o sea lo que sea; supone revalorizar esta perspectiva más colectiva, centrada en el entorno, partiendo de la base de que los trastornos no existen, que lo que existe es una sociedad con problemas para aceptar, encajar el sufrimiento psíquico; o que la persona sea capaz de acomodar, transformar su entorno para adaptarlo al sufrimiento psíquico que está pasando. Creo que es una perspectiva bastante interesante. Una transformación de lo que entendemos por cuidados colectivos y por cuidados institucionales, institucionalizados.
También recomendaría mucha auto-formación, pues estamos hablando de algo tan importante como la vida de esta persona, y todo lo que tenga que ver con auto-gestionar el conocimiento, incluso generarlo uno mismo, me parece también importante; y es algo que no se promueve.


5. En las presentaciones de tu libro y en los posteriores debates, habrás recibido todo tipo de críticas más o menos constructivas hacia su contenido. ¿Puedes compartir con nosotras alguna de las reflexiones que más te han aportado, así como alguna experiencia que te haya conmovido y emocionado?

Efectivamente, he recibido muchas críticas. En Barcelona recibí una, que me llamó la atención y con la que estoy más o menos de acuerdo, que consistía en que el libro no dejaba de aportar una perspectiva centrada en la persona; es decir, un poco individualista, lo cual es cierto. Y también me plantearon en ese mismo debate que en el libro no hablo de cuestiones meramente sociales, lo cual también es cierto. Pero cuándo yo escribí el libro mi objetivo no era proporcionar una herramienta a personas involucradas en movimientos sociales o políticos, sino proporcionar una herramienta a cualquier persona, aunque no estuviera involucrada en estos movimientos.
La perspectiva de hacer activismo solamente dentro del campo de los movimientos sociales es demasiado exclusiva, privilegiada también; y para mí la política, o el campo social, es más amplio y tiene que ver con la sociedad en general, no solo con que los movimientos sociales tengan herramientas privilegiadas a las que el resto de personas no tengan acceso.
Eso como crítica. Asumo la incoherencia, que también es política, soy consciente de ello.
En cuanto a experiencias emocionantes, afortunadamente algo impagable para mí ha sido que muchas personas se acercaban después de muchas charlas y me daban las gracias por haberlo escrito porque les había cambiado un poco la perspectiva. Más que por utilizar las herramientas concretas que yo sugiero en el libro, me han comentado que lo que les ha empoderado (puedo utilizar este término pues hace referencia a la perspectiva que doy, de que la persona puede cambiar su entorno, desde lo colectivo, no desde lo individual) es la perspectiva que les puede haber dado.
Entonces, para mí eso es emocionante, esos momentos han sido bastante bonito. Es lo único que me ha dado la sensación de que realmente he hecho algo que es útil y válido.
Concretamente, en Madrid una chica me regaló un libro (fue un intercambio por el mío) que había escrito. Un libro muy chulo, muy bonito, donde explicaba una época que pasó, una serie de delirios. Me pareció, aparte de ser un gesto precioso, el que me lo diera y la emoción que yo veía que ella sentía; algo impagable.